The pompous or boastful words represent the 4 major claims that America makes for itself:

1) America is ‘One nation under God’. We put “In God We Trust” on our currency and coinage, and like to believe that God established our nation, and that it is uniquely pleasing to Him and serves His purposes.
2) American Democracy is the best form of government, and ought to be copied by every other nation in the world.
3) America is the champion of freedom for all mankind.
4) America is the unrivaled superpower of the world.

GOD DISAGREES Although these claims might seem to have some validity from a human standpoint, the Bible contradicts every single one of them.
First of all, the Bible talks about another ‘nation under god’. It is described in Daniel 7:18, 22, 27 as “the saints of the Most High”. The apostle Peter describes these people as a chosen generation, a royal priesthood, a holy nation, and a people who are God’s own special possession (1 Peter 2:9). God is talking about all of those people, down through the centuries, who have washed away their sins in the blood of God’s Lamb, Jesus Christ, and have then gone on to serve Him with an allegiance that rises above any earthly citizenship. It is this ‘nation under God’ that will come back to earth with the Lord Jesus, to rule the world with Him in fulfillment of His promise.

Secondly, there is only one best form of government for mankind. It is not a democracy; it is a theocracy. It is not based upon the will and wisdom of mankind, but upon the will and wisdom of almighty God. It is this form of government which will be established on earth when mankind, in its collective wisdom, has all but destroyed this planet and every living thing on it. Democracy supposedly insures that a nation's leadership will be representative of the majority of its people. It does not insure, however, that the majority will choose what is right.

The Bible says that there are ‘none righteous’ and not one that seeks after God. It also says that all of mankind together, giving its best cooperative effort, is ‘unprofitable’ (Psalms 14:1-3, Romans 3:12). In the light of these truths, it is hard to understand how any Christian can believe that anything but disaster will ultimately result from democracy. Christians who believe that they can serve God and promote His kingdom through the ballot box are deceived, and need to re-examine their beliefs. The end-product of democracy, practiced by a rebellious human race, will always be contention against God.

Thirdly, there is only one real champion of freedom for mankind; freedom from the fear of death that hangs over our heads every day, and freedom from the tyranny of Sin within us, that keeps us from being the kind of people, and living the kinds of lives that we really want to live. That is the Lord Jesus Christ. Most of us feel ‘free’ if our health is good and we have money in our pockets, but such a perspective is shortsighted. None of us is ever truly free apart from a personal relationship with Jesus Christ. He owns the universe and has conquered death. To know Him is to be rich indeed, and free indeed.

Lastly, there is only one real superpower in this world, or in the universe for that matter. That, again, is the Lord Jesus Christ; the One to whom all power and authority have been given, in heaven and on earth (Matthew 28:18). Right now He is restraining the exercise of that power, as he allows people and nations to decide whether or not they will submit to Him. But a day is coming, a day that the Bible calls “The Day of the Lord”, when He will exercise His power openly. In Isaiah 2:17 we are told that it will be a day when God will be exalted, and mankind will be humbled.

... At the present time America is embroiled in the second Iraq War. American leaders used the 9/11 attack to justify an attempt to dominate the oil wealth of the Iraqi people; an oil deposit that some believe may rival that of Saudi Arabia. Iraqi oil, however, represents much more than potential American wealth; it represents the future balance of power in the world. If China, Russia, India or others were to control its distribution, then they might be able to build industrial empires and amass wealth and military power to rival the West. Hence the war in Iraq is as much about who will not get the oil, as about who will get it. It's not that America needs the oil; it's that America doesn't want anyone else to have it. America's plan is to dominate the consumption of Middle Eastern oil first, so that it will then be able to fall back on its own western hemisphere reserves, which will then be of much greater economic value than they are now.

Las palabras pomposas o jactanciosas representan las 4 reclamaciones que América hace para sí:

1) América es ‘Una nación bajo Dios’. Ponemos “En Dios Confiamos” en nuestro dinero y monedas, y que gusta creer que Dios estableció nuestra nación, y que esto le complace únicamente y sirve Sus objetivos.
2) La Democracia americana es la mejor forma del gobierno, y debería ser copiada por toda otra nación en el mundo.
3) América es el campeón de libertad para toda la humanidad.
4) América no tiene rival.

DIOS DISCREPA: Aunque estas reclamaciones pudieran parecer tener alguna validez desde un punto de vista humano, la Biblia contradice cada uno de ellos.
En primer lugar, la Biblia habla de otra ‘nación bajo Dios’. Es descrito en Daniel 7:18, 22, 27 como “los santos del más Alto”. El apóstol Peter describe a esta gente como una generación elegida, un clero real, una nación santa, y una gente que es la propia posesión especial de Dios (1 Peter 2:9). Dios habla de toda aquella gente, abajo durante los siglos, quiénes han quitado lavando sus pecados en la sangre del Cordero de Dios, Jesucristo, y han continuado entonces a servirlo con una lealtad que se eleva encima de cualquier ciudadanía terrenal. Es esta ‘nación bajo Dios’ que volverá a la tierra con el Señor Jesús, gobernar el mundo con Él en la realización de Su promesa.

En segundo lugar, hay sólo una mejor forma del gobierno para la humanidad. Esto no es una democracia; esto es una teocracia. No está basado sobre la voluntad y la sabiduría de la humanidad, pero sobre la voluntad y la sabiduría de Dios omnipotente. Esto es esta forma del gobierno que será establecido en la tierra cuando la humanidad, en su sabiduría colectiva, ha destruido casi este planeta y cada criatura en ello. La democracia supuestamente asegura que un mando nacional será representativo de la mayoría de su gente. Esto no asegura, sin embargo, que la mayoría elegirá lo que es correcto.

La Biblia dice que no hay 'ninguno justo' y no hay uno que busca a Dios. Esto también dice que toda humanidad juntos, dando a su mejor esfuerzo cooperativo, es 'poco rentable' (Salmos 14:1-3, romanos 3:12). En la luz de estas verdades, es difícil entender como cualquier Christiano puede creer que todo menos el desastre resultará por último de la democracia. Los cristianos que creen que ellos pueden servir a Dios y promover Su reino por la urna son engañados, y tienen que reexaminar sus creencia. El producto final de democracia, practicada por una raza humana rebelde, siempre será la opinión contra Dios.

En tercer lugar, hay sólo un verdadero campeón de la libertad para la humanidad; la libertad del miedo de muerte que cuelga sobre nuestras cabezas cada día, y libertad de la tiranía de Pecado dentro de nosotros, que nos impide ser la clase de la gente, y vivir las clases de vidas que realmente queremos vivir. Es el Señor Jesucristo. La mayor parte de nosotros se sienten 'libres' si nuestra salud está bien y tenemos el dinero en nuestros bolsillos, pero tal perspectiva es miope. Ninguno de nosotros está realmente libre alguna vez aparte de una relación personal con Jesucristo. Él posee el universo y ha triunfado sobre la muerte. Conocerlo es ser rico en efecto, y libre en efecto.

Finalmente, hay sólo una verdadera superpotencia en este mundo, o en el universo en realidad., otra vez, es el Señor Jesucristo; Un a quien todo el poder y las autoridades han sido dados, en el cielo y en la tierra (Matthew 28:18). Ahora mismo Él retiene el ejercicio de aquel poder, cuando él permite que la gente y naciones se decida si ellos se rendirán a Él. Pero un día viene, un día que la Biblia llama “el Día del Señor”, cuando Él ejercerá Su poder abiertamente. En Isaiah 2:17 nos dicen que esto será un día cuando Dios será exaltado, y la humanidad será humillada.

...En este momento América está embrollada con la segunda Guerra de Iraq. Los líderes americanos usaron el ataque de 9/11 para justificar una tentativa de dominar la riqueza del petróleo de la gente iraquí; un depósito de petróleo que unos creen puede rivalizar con el de Arabia Saudí. El petróleo iraquí, sin embargo, representa mucho más que la riqueza americana potencial; esto representa el futuro equilibrio de fuerzas en el mundo. Si China, Rusia, India o los otros debieran controlar su distribución, entonces ellos podrían ser capaces de construir Imperios industriales y acumular la riqueza y el poder militar de rivalizar con el Oeste. De ahí la guerra en Iraq es mucho más sobre quién no conseguirá el petróleo, como sobre quién lo conseguirá. No es que América necesita el petróleo; sino que América no quiere que nadie más lo tenga. El plan de América es dominar el consumo de petróleo del Medio Oriente primero, de modo que sea capaz entonces de echar mano a sus propias reservas en el hemisferio occidental, las mismas que serán entonces de mucho mayor valor económico que el que actualmente tienen.

Algunos comentarios adicionales extraidos del libro
"AMERICA and BRITAIN in prophecy" del limeño (Ohio) David C. Pack

Mientras los decendientes de Abraham seguian fieles a Dios y sus mandamientos, la prosperidad de pueblos estuvo asegurada. Igualmente ocurrio con paises fundados bajo influencia Cristiana como los Estados Unidos de America según la intención de sus primeros presidentes. Hubo un periodo de inmensa prosperidad en todos los campos y prevalencia en el mundo. Estados Unidos de America junto con Inglaterra tenian la mayoria de las riquezas que se explotaban por lo menos hasta la decada de los años 50. Ambos disfrutaron de abundantes cosechas y enorme capacidad productiva de los recursos escenciales para la prosperidad y predominio mundial.

Posteriormente Estados Unidos de America y Gran Bretaña en conjunto reunian riqueza y una significativa población economicamente activa y que gozaba de gran prosperidad relativa. Como generalmente ocurre, esa prosperidad hizo que a ambos paises les ocurriera lo mismo que a otros poderosos imperios de otras epocas, el creer que esa prosperidad se debió a merito propio en vez de reconocerlo como regalo de Dios. Progresivamente Dios fue apartando Su apoyo que les dio esa prosperidad y los dejó desarrollarse en su libre albedrio llenándose de falsos orgullos y desvinculandose de Dios, con las consabidas consecuencias que eso finalmente derivó y derivará.

Lo que le espera a ambos paises no solo es un descalabro económico, sino plagas, enfermedades, hambruna, etc. hasta el retorno de Jesus.
Si tan solo los pueblos que se apartaron de la manera que Dios quiere que la humanidad se comporte, se arrepintieran, Dios siempre les devolvería la prosperidad.

Adicionalmente, escuchar y leer lo anotado en la página 5 que está relacionado.

Is the NY Post comparing Obama to a chimp?
Published Wed, Feb 18, 2009 10:28am ET by Eric Boehlert. Here's the cartoon

Notes Sam Stein at the Huffington Post:

At its most benign, the cartoon suggests that the stimulus bill was so bad, monkeys may as well have written it. Most provocatively, it compares the president to a rabid chimp. Either way, the incorporation of violence and (on a darker level) race into politics is bound to be controversial.

Click this photo to download a beautiful 2.4 MB Power Point slide show of the good and prosperous times of the U. S. A.

Founded in 1919

30 million USA policy holders

Operative in 139 countries

Provides insurance to 100,000 companies and other entities

Now bankrupt handing "golden parachutes" and seeking more "bailouts"

Harvest TV Interview from John Price on Vimeo.
U.S.A. - Israeli broken agreement